Artículo original: Junker T, Tivell L, Rønnegaard AE, Duus LA, Olesen TH, Lund L, et al. Safety of CT-guided percutaneous cryoablation in patients treated for clinical T1 renal cell carcinoma with the need for pre-procedural ureteral stenting: an international cohort study. Clin Radiol. 2025 Mar;82:106806.
DOI: 10.1016/j.crad.2025.106806.
Sociedad: Clinical Radiology (@ClinRadiology).
Palabras clave: Carcinoma de células renales en estadio inicial, Crioablación percutánea.
Abreviaturas y acrónimos: ERC (Enfermedad Renal Crónica), PCA (Crioablación Percutánea), PN (Nefrectomía Parcial), RCC (Carcinoma de Células Renales).
Línea editorial: Clinical Radiology es una revista científica de periodicidad bimestral que publica 6 números al año. Es el órgano oficial de expresión científica de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM). La revista publica dos ediciones, una en español y otra en inglés, y todos los artículos pasan por un proceso de revisión por pares doble ciego. La revista aborda temas relevantes y actuales en el campo de la radiología, siendo una herramienta invaluable Apara cualquier profesional que quiera mantenerse a la vanguardia de su campo.
En su último número (volumen 82, Marzo 2025), ofrece una diversidad de artículos innovadores divididos por órganos y sistemas, muchos de ellos aplicando las nuevas técnicas de inteligencia artificial como, por ejemplo, el Deep Learning. Otro artículo que me ha llamado la atención del último volumen es: Diagnostic performance of multiparametric nonenhanced magnetic resonance imaging (MRI) in grading glioma and correlating IDH mutation status.
Motivo para la selección: He escogido este artículo por su relevancia en el tratamiento del carcinoma renal T1 mediante crioablación percutánea guiada por tomografía computarizada (TC), una técnica mínimamente invasiva en auge que permite impedir la realización de una cirugía abierta con sus complicaciones que comportan. Además, este estudio implica pacientes que requieren un stent ureteral previo al procedimiento, un aspecto crucial que desconocía y, por este motivo, más razón para revisión de este artículo.
Resumen: El manejo del carcinoma de células renal en estadio clínico T1, en etapas iniciales, requiere un tratamiento efectivo que minimice los riesgos y preserve la función renal, especialmente en pacientes con comorbilidades o aquellos que no son candidatos para cirugía. La crioablación percutánea guiada por TC ha emergido como una alternativa mínimamente invasiva frente a la nefrectomía parcial, ofreciendo buenos resultados oncológicos con menos complicaciones, así como una mejor preservación de la función renal con una reducción promedio del 11% en la función renal sin conducir a diálisis aguda ni avance significativo de la ERC. Particularmente, este estudio se centra en un subgrupo específico de pacientes: aquellos que necesitan la colocación de un stent ureteral antes del procedimiento debido a la proximidad del tumor al sistema pielocalicial u otras características anatómicas.
El objetivo principal del estudio es evaluar la seguridad de la crioablación percutánea (PCA) en este contexto particular, dado que la colocación previa de un stent puede aumentar el riesgo de complicaciones. Para ello, se realizó un análisis retrospectivo de una cohorte internacional que incluyó 61 pacientes tratados con esta técnica. Los investigadores analizaron las tasas de complicaciones post-operatorias, tanto menores como mayores, así como los factores asociados con un mayor riesgo de eventos adversos.
El estudio muestra que el 36% de los pacientes experimentaron complicaciones postoperatorias, siendo las mayores relativamente poco frecuentes. La mayoría de las complicaciones (77%) son menores o leves, incluyendo síntomas comunes como sangrado, hematuria, fiebre y dolor, que generalmente mejoran con tratamiento conservador. Por otro lado, el 10% de los pacientes presentaron complicaciones mayores, las cuales son obstrucción urinaria, estenosis pélvica renal y urinoma o fístula, requiriendo derivaciones urinarias.
Otro aspecto a destacar es el uso de más de tres criosondas identificado como un factor asociado a un mayor riesgo de complicaciones (OR: 4.19, p=0.010). A pesar de estas complicaciones tempranas, no se han registrado obstrucciones urinarias crónicas ni problemas graves a largo plazo, lo que refuerza la seguridad del procedimiento.
Desde una perspectiva clínica, este estudio tiene implicaciones importantes para la práctica médica. En primer lugar, confirma que la PCA guiada por TC es una opción viable y segura para tratar el carcinoma renal T1 incluso en pacientes con necesidades complejas, como aquellos que requieran stents ureterales previos. Sin embargo, subraya la importancia de un seguimiento cercano tras el procedimiento para manejar posibles complicaciones tempranas. También proporciona información valiosa sobre cómo optimizar el procedimiento, por ejemplo, limitando el número de criosondas utilizadas cuando sea posible.
Los resultados oncológicos para tumores T1a tratados con crioablación son comparables a los obtenidos mediante cirugía en términos de control local y supervivencia a largo plazo. Sin embargo, para tumores T1b más grandes o complejos, aún existen incertidumbres sobre su eficacia relativa frente a la nefrectomía parcial.
En términos generales, los resultados de este artículo refuerzan el papel de la crioablación percutánea como una técnica segura y efectiva para tratar tumores renales en estadio inicial (T1), incluso en este caso tan específico como la necesidad de stents ureterales previos al procedimiento. Este estudio llena un vacío importante en la literatura médica y proporciona una base sólida para futuras investigaciones. Por último, esta técnica presenta unas probabilidades moderadas de complicaciones tempranas, que son manejables y no afectan significativamente la función renal ni el control oncológico.
Valoración personal: Me ha parecido un artículo mucho más interesante de lo que me esperaba porque permite dar un salto significativo en el manejo del carcinoma renal T1 en casos complejos. Los resultados demuestran que la crioablación percutánea es viable y segura incluso en pacientes que requieren stent ureteral previo. Como cualquier procedimiento mínimamente invasivo es necesario una cuidadosa selección y seguimiento del paciente, sobre todo a corto plazo, el cual no difiere de otros artículos sobre procedimientos invasivos. Sin embargo, lo que destaca de este artículo es que pone de manifiesto todas las posibles complicaciones que debemos tener en cuenta y sus factores de riesgo que pueden llevar a ellas.
Sociedad a la que pertenece la publicación: Clinical Radiology (@ClinRadiology).
Sección (órgano-sistema): Radiología abdominal.
Técnica radiológica: Tomografía Computarizada.
Tipo de artículo: Artículo de investigación.
Año de residencia recomendado: R2-R4
Pompeu Pascual Escribano
Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, R2.
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