Artículo original: Law W, Swensson J, Mayhew M, Zaydfudim V, Khot R. Imaging and management of complications post biliary-enteric anastomosis. Abdom Radiol (NY). 2025.
DOI: https://doi.org/10.1007/s00261-024-04705-x
Sociedad: Society of Abdominal Radiology (@Abdominal_Rad)
Palabras clave: benign biliary pathologies, biliary system, biliary-enteric anastomosis, bile leak, biliary anastomotic stricture, cholangitis.
Abreviaturas y acrónimos utilizados: BEA (anastomosis biliar-entérica), HIDA (gammagrafía con ácido iminodiacético hepatobiliar), MRI/RM (Resonancia magnética), TC (tomagrafía computarizada), US (Ultrasonido).
Línea editorial del número: Abdominal Radiology es la revista oficial de la Sociedad de Radiología Abdominal, de publicación mensual y proyección internacional. Su propósito es ofrecer un foro de discusión, con contenido especializado y actualizado, para la investigación y el desarrollo de nuevas técnicas de imagen aplicadas al diagnóstico y tratamiento de enfermedades abdominales. A lo largo de este último mes de enero emite el número 13, donde se han publicado artículos de diversa índole, entre los que destaco un estudio sobre la asociación e influencia de distintos tratamientos del hepatocarcinoma sobre la clasificación LI-RADS (https://doi.org/10.1007/s00261-025-04811-4), ya que es un tema de gran relevancia, innovación e interés en la práctica diaria.
Motivos para la selección: La revisión aborda un enfoque multidisciplinar de las complicaciones postquirúrgicas tras la realización de una anastomosis bilio-entérica. La correlación diagnóstica y terapéutica, desde el punto de vista radiológico, que se expone en este artículo me permite tener una visión generalizada e integral de la especialidad en mis inicios como residente.
Personalmente, considero que el amplio diagnóstico diferencial que realiza la revisión entre las posibles complicaciones, así como su caracterización y ejemplificación con imágenes, constituye un buen ejemplo para familiarizarme con la patología postquirúrgica; siendo esta de gran importancia en la práctica clínica diaria.
Resumen:
La anastomosis bilio-entérica (BEA) es un procedimiento quirúrgico en expansión, utilizado para restablecer la continuidad de la vía biliar con el intestino delgado y forma parte del abordaje terapéutico de múltiples patologías. Este artículo pretende resaltar la importancia de las técnicas de imagen (US, TC, RM, HIDA) en el diagnóstico precoz, así como la correcta caracterización radiológica e incluso su papel terapéutico en las posibles complicaciones derivadas de este método. Entre estas destacan: fugas anastomóticas, estenosis anastomóticas biliares y colangitis, entre otras. El cómputo de dichas herramientas influirá favorablemente en la planificación terapéutica y en los resultados pronósticos de los pacientes.
Papel de las técnicas de imagen y sus desafíos en la interpretación:
Las técnicas de imagen son esenciales en el abordaje diagnóstico tras la realización de BEA.
- MRI-MRCP: técnica de elección en el estudio de complicaciones. Se basa en secuencias ponderadas en T2, que permiten evaluar minuciosamente la anatomía biliar intrahepática y la zona de las anastomosis, pudiendo detectar posibles fugas o estenosis. La utilización de contrastes hepatoespecíficos como Eovist o Primovist, aumentan su rendimiento diagnóstico.
- TC: técnica de imagen inicial por su amplia disponibilidad y rapidez, especialmente útil en la valoración de colecciones, abscesos y como guía para su drenaje percutáneo.
- GAMMAGRAFÍA NUCLEAR (HIDA), es de utilidad en la caracterización de fugas biliares.
- US: su papel es limitado, aunque puede cobrar importancia en la valoración inicial de pacientes sintomáticos; con hallazgos de significación en el contexto, como dilatación de la vía biliar intrahepática o posibles colecciones.
La interpretación de imágenes en las complicaciones post-BEA enfrenta desafíos debido a las limitaciones de cada técnica (operador-dependiente en ecografía, artefactos respiratorios y artefactos de susceptibilidad como material quirúrgico en RM y la superposición intestinal en TC, etc.). Por todo ello, el enfoque y la caracterización multimodal es de vital importancia.
Se aprecian ciertas complicaciones postquirúrgicas asociadas a la técnica quirúrgica descrita. La prevalencia varía en función de las características anatómicas del paciente, el juicio clínico previo y la técnica quirúrgica empleada.
-Tempranas (primer mes postintervención):
- Fugas biliares: las técnicas de imagen no sólo permiten su detección (mediante HIDA y RM con contraste hepatoespecífico) sino su abordaje terapéutico mediante TC. Pueden complicarse en forma de bilioma (hipodensos y con una atenuación menor a 20 UH en TC). Ante la posibilidad de una posible fuga, es necesario plantear un amplio diagnóstico diferencial.
- Colangitis: el diagnóstico se basa en el cómputo de criterios clínicos, analíticos y radiológicos. En RM se caracteriza por restricción de la difusión, hipointensidad T1 e hiperintensidad T2. La mayor parte se resuelven con tratamiento antibiótico, precisando un 30% de drenaje y un 9% de intervención quirúrgica.
-Tardías (a partir del segundo mes postintervención):
- Estenosis anastomótica biliar: el diagnóstico se realiza mediante MRCP, apreciándose dilatación biliar proximal a la estenosis; pudiendo estar artefactado por el material quirúrgico. El manejo terapéutico incluye intervenciones transhepáticas endoscópicas o percutáneas.
- Colangitis recurrente.
- Coledocolitiasis secundaria y hepatolitiasis: las litiasis se aprecian en ecografía como estructuras hiperecogénicas, con sombra acústica posterior, que pueden desencadenar dilatación de la vía biliar intrahepática. En TC se pueden intuir, especialmente si son de alta densidad, y en RM aparecen como vacíos de señal en T2 y pueden mostrar hiperintensidad en T1. La mayor parte del manejo es mediante CPRE.
- Cirrosis biliar secundaria y atrofia hepática: como signos de progresión de afectación hepática, pudiendo desembocar en cirrosis 48-62 meses después de la obstrucción. Niveles elevados y persistentes de ALT y las obstrucciones biliares de gran calibre, son factores predisponentes.
Para concluir la revisión de este artículo, me gustaría destacar la importancia de la obtención de imágenes para la valoración de las posibles complicaciones post-BEA; el manejo multimodal e integral es esencial para la caracterización íntegra del proceso y evitar las consecuencias derivadas de la progresión de las mismas. La TC constituye la herramienta diagnóstica inicial; siendo de utilidad otras técnicas más específicas, como resonancia magnética o HIDA para la evaluación de fugas biliares (complicación postquirúrgica más frecuente). La radiología es una herramienta inherente en este proceso, que permite abordarlas y llevar a cabo un diagnóstico precoz, mejorando los resultados pronósticos de los pacientes afectados.
Valoración personal:
Personalmente, considero que este artículo representa una valiosa herramienta para residentes de radiología y radiólogos generales, proporcionando una visión integral del manejo diagnóstico y abordaje terapéutico de las complicaciones asociadas a esta práctica. A través de imágenes de interés, nos permite caracterizarlas mediante diferentes técnicas y esclarecer su diagnóstico diferencial.
Como punto negativo destaco la disposición de las imágenes; me hubiera gustado que estuvieran organizadas de otro modo para que fuera más asequible quedarse con las ideas claves del diagnóstico diferencial sin recurrir al texto adyacente.
Aunque creo que es un artículo de complejidad moderada, me parece muy completo y útil para ponerlo en práctica a lo largo de los próximos años. La visión multimodal que ofrece en cuanto a la proporción de herramientas diagnósticas y manejo terapéutico no invasivo por parte del radiólogo, me permite establecer como R1 ciertas ideas generales, principalmente relacionadas con patología postquirúrgica, superponibles a otros procesos diagnósticos que forman parte del día a día del servicio de mi hospital.
Sociedad a la que pertenece la publicación: Society of Abdominal Radiology (@Abdominal_Rad)
Sección (órgano-sistema): abdomen.
Técnica radiológica (US, TC, RM…): TC y RM.
Tipo de artículo: revisión sistemática.
Año de residencia recomendado: R2, R3 y R4.
Carmen Carrera Jara.
Hospital Infanta Elena, Huelva, R1
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