Título de la revisión: Artefacto en cola de cometa en ecografía: ¿es un hallazgo compatible con benignidad en patología de la vesícula biliar?
Artículo original: Hoon S, Young H y Jin H. Comet tail artifact on ultrasonography: is it a reliable finding of benign gallbladder diseases? Ultrasonography. 2019; 38:221-230.
DOI: https://doi.org/10.14366/usg.18029
Sociedad: Korean Society of Ultrasound in Medicine.
Palabras clave: Gallbladder, ultrasonography, artifact.
Abreviaturas y acrónimos utilizados: ACC (artefacto en cola de cometa), VB (vesícula biliar), senos de Rokitansky-Aschoff (SAR).
Línea editorial del número:
Ultrasonography es la revista oficial de la Korean Society of Ultrasound in Medicine. Es una revista internacional dedicada a la práctica, investigación, tecnología y educación acerca del ultrasonido. Todo su contenido es de acceso abierto y se publica cuatro veces al año, en enero, abril, julio y octubre. Contiene artículos originales, notas técnicas, revisiones temáticas, ensayos y se publican materiales editoriales que cubren temas de vanguardia. El objetivo de la revista es proporcionar información actualizada sobre nuevos conceptos de diagnóstico y desarrollo técnico, incluídos los estudios experimentales en animales que utilizan nuevos equipos, además de problemas contemporáneos sobre atención al paciente.
En el número de este mes, dentro de los artículos destacados, podemos encontrar tres artículos de revisión. El primero de ellos dedicado al seguimiento del carcinoma hepatocelular en base a las guías de países del este y el oeste de Corea, otro dedicado a la actualidad sobre el contraste ecográfico en la patología del carcinoma hepatocelular y otro más acerca de la precisión diagnóstica de la ecografía sobre las roturas del manguito rotador. Ya adentrándonos en los artículos originales podemos encontrar, además del que voy a realizar la revisión, otro sobre la asociación de malignidad de los nódulos de tiroides según su localización, uno sobre las mediciones del ensanchamiento fisiológico de la sindesmosis del tobillo mediante ecografía 3D dinámica, un tercero acerca de la experiencia de biopsiar 125 casos de tumores supratentoriales con ultrasonido en 2 dimensiones frente al de 3 dimensiones, otro sobre la fiabilidad estudios ecográficos de mama con sistemas automáticos frente a sistemas manuales y el último sobre la viabilidad de la localización de el agua de hilo absorbible en lesiones mamarias no palpables.
Motivo para la selección:
Conocer el artefacto de cola de cometa en la interpretación de lesiones de la vesícula biliar es un tema que debería dominar cualquier persona que se dedique a la ecografía abdominal y a la adquisición de imágenes de ésta, debido a la alta incidencia de este artefacto cuando se efectúan estudios abdominales.
Resumen:
El artefacto de cola de cometa (ACC) es un artefacto de reverberación útil, ya que a menudo acompaña de una lesión de la pared de la vesícula biliar (VB). La presencia o ausencia del ACC depende de la configuración de las lesiones de la vesícula biliar. Este estudio pretendía evaluar, de manera retrospectiva, si el ACC podía usarse como hallazgo fiable en lesiones malignas de la VB.
Los autores del artículo definen el ACC como la presencia de un foco hiperecoico brillante en la lesión de la VB y una reverberancia acústica posterior en forma de triángulo invertido al foco hiperecogénico, que además presenta una disminución gradual en la escala de ecogenicidad. Los ACC son el resultado de los cristales de colesterol depositados en los senos de Rokitansky-Aschoff (SAR), este depósito es consecuencia del aumento de la presión endoluminal. Sin embargo, los SAR también están presentes en casos de colecistitis crónica.
Se consideró engrosamiento de la pared de la VB a 3 o más milímetros de grosor. Además se evaluaron la irregularidad del margen de las lesiones, la pérdida de la capa de la pared, la presencia de quistes intralesionales y los focos ecogénicos; además de la presencia de cálculos biliares, la invasión de órganos adyacentes, el agrandamiento de los ganglios linfáticos y el colapso de la luz de la VB.
Como se ha indicado con anterioridad, este estudio se llevó a cabo de forma retrospectiva, de tal manera que a los pacientes no se les proporcionó un consentimiento informado para realizar la investigación. Los estudios fueron adquiridos entre enero del 2012 y diciembre del 2016, en total fueron 296 casos los que presentaron el ACC en VB. Se excluyeron 148, 62 de ellos por ser estudios repetidos por seguimiento y 82 no se sometieron a cirugía o se perdieron durante el seguimiento. En total fueron 150 los estudios que se incluyeron en esta publicación ya que se sometieron a una colecistectomía. En algunos casos, hubo al menos dos diagnósticos patológicos, en estos casos se utilizó el hallazgo primario para determinar el diagnóstico patológico final. De los 150 pacientes incluidos en el análisis de datos finales, los números respectivos de pacientes masculinos y femeninos fueron 85 (56,7%) y 65 (43,3%). La edad media fue de 44.1 ± 11.0 años (rango, 21 a 84 años).
La adquisición de imágenes se llevó a cabo con un ecógrafo iU22 Philips Medical System y un transductor de matriz convexa, no indica qué rangos de frecuencia. Los exámenes se llevaron a cabo con el paciente en decúbito supino o en decúbito lateral izquierdo, en ayunas. Las imágenes se realizaron en modo B en escala de grises con armónicos, y con y sin zoom. Dichas imágenes las tomaron dos radiólogos con más de veinte años de experiencia en ecografía abdominal.
El diagnóstico clínico preoperatorio se realizó en función del ressultado que se obtuvo en el estudio ecográfico y correspondió directamente a la indicación quirúrgica. Los diagnósticos ecográficos preoperatorios fueron los siguientes: colecistitis aguda, colecistitis crónica, adenomomatosis, colesterolosis, pólipo benigno, colecistitis xantogranulomatosa y carcinoma de VB. Cinco pacientes (2 %) fueron diagnosticados de carcinoma de VB en la ecografía preoperatoria. De los 150 pacientes, 74 (49,3%) tenían síntomas de cólicos biliares acompañantes. El grosor máximo promedio de la lesión de la vesícula biliar en la ecografía fue de 5,7 mm (rango de 3 a 14 mm). El número de lesiones difusas (determinando como lesión difusa la que está presente en más de una localización anatómica de la VB, es decir, del fundus, del cuerpo y del cuello) fue de 91 (60,7%), y el número de lesiones localizadas (determinando como lesiones localizadas aquellas que están presentes en una única ubicación anatómica de las antes citadas) fue de 59 (39,3%). Veintinueve pacientes (19,3%) mostraron un margen irregular y 96 (64,0%) mostraron una pérdida de la capa de pared. Cuatro pacientes (2,7%) tenían una lesión quística intralesional y en 22 (14,7%) se objetivaron focos ecogénicos intralesionales.
El número de lesiones acompañadas de cálculos biliares fue de 120 (80,0%). Los valores promedio de la longitud y el grosor máximos del ACC fueron 7.6 mm y 3.2 mm, respectivamente. Ningún paciente mostró afectación de órganos adyacente o adenopatías. No hubo malignidad en ninguna de las 150 lesiones de la vesícula biliar engrosada. Tampoco se obtuvieron diferencias estadísticamente significativas en la edad media (P = 0.145), la proporción de sexos (P = 0.667) o la presencia de síntomas cólicos biliares (P = 0.163) entre las cuatro enfermedades.
Se determinó que las lesiones de la VB que mostraban ACC se diagnosticaron como colecistitis crónica, adenomiomatosis, colesterolosis y colecistitis xantogranulomatosa, y no hubo diferencias en la proporción de cada diagnóstico, incluso cuando los grupos se dividieron según la extensión de la lesión. Por lo tanto, a excepción de la colesterolosis, las enfermedades de la VB con ACC están asociadas a las enfermedades en las cuales existen los SAR. Este estudio no pudo encontrar ninguna asociación entre la colesterolosis y los SAR, o entre la colesterolosis y los cálculos biliares. Una vez se correlacionaron los datos, no se pudo encontrar ninguna asociación entre la colesterolosis y los SAR, o entre la colesterolosis y los cálculos biliares. Además, esta investigación no pudo identificar otras causas significativas de los ACC en la colesterolosis.
Valoración personal:
Como puntos fuertes destacaría una buena metodología de análisis de datos, también se han valorado diferentes tipos de patologías en las que se ha visto el ACC junto con los resultados de la cirugía en todos los pacientes del estudio, reforzando así el diagnóstico ecográfico de benignidad una vez se ha elaborado el diagnóstico de la cirugía.
En la evaluación de puntos débiles cabe mencionar que no se dio a los pacientes ningún tipo de consentimiento informado, tampoco se habla de ninguna inclusión en comités de ética. De la misma forma, el estudio es llevado a cabo en un mismo centro hospitalario y no recurren a la colaboración con otros centros para reforzar sus hallazgos.
Estela Mendoza Bielsa
emendoza@sjdhospitalbarcelona.org, @ecografiaenmodo
Hospital Sant Joan de Déu, Esplugues de Llobregat, TSIDM.
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